Posadas Turísticas en el Occidente Antioqueño

En Liborina suenan las “Posadas Turísticas” del Occidente Antioqueño Como una experiencia de organización y desarrollo comunitario en fomento del ecoturismo y la protección a los recursos naturales; se encuentra una vereda límite entre el clima caluroso del Occidente Antioqueño,  el Páramo de Belmira y el frío de San José de la Montaña, nace la primer propuesta de “Posadas Turísticas” en la Vereda el Socorro, Corregimiento del Carmen de la Venta en el municipio de Liborina. Elkin Lopera Escudero, emprendedor SENA, líder comunitario y apasionado por el ecoturismo y su municipio; emprende con el SENA Occidente Antioqueño la instauración de “Posadas Turísticas” en su comunidad, un proyecto que ya cuenta con apoyo de la Unión Europea como miembro de la Organización de Escuelas Campesinas, liderando el proceso a nivel mundial y quienes han recibido intercambios de conocimiento de países como Cuba, Ecuador, Perú y Francia; y que ahora se la juega por ser modelo en ecoturismo. Desde una posición privilegiada, extendiéndose sobre la Cordillera de los Andes, Liborina es un municipio rico en cuencas hídricas y caminos de inigualable riqueza ambiental hacia el Páramo de Belmira y Santa Inés, patrimonio que Elkin Lopera asegura “genera grandes expectativas frente al tema del agroturismo, ecoturismo y  desarrollo comunitario, un proceso que llevamos hace 10 año, que surgió a través de la organización de nuestra comunidad y el amor por ella; ahora queremos aprovechar el recursos hídrico, cultural y comunitario para que turistas puedan disfrutar de nuestro paraíso terrenal”. Conformada por 10 familias,  que actualmente tienen una capacidad para hospedar a 40 personas, tiendas comunitarias con productos autóctonos, rutas turísticas validadas por el SENA con corredores para guianza en escalada,  expedicionismo, torrentismo, pesca, entre otros; que comienzan con desayunos de tradición campesina y finalizan en noches bohemias al son del tiple y la lira y; un joven que une a su familia y comunidad en la actividad turística, desde la adecuación de sus casas como posadas, la venta de sus propio “mecato” un estrategia de consumo tradicional en donde no se ven papitas, ni roquitas, ni marcas multinacionales sino galletas, yogures, panes, frituras y arequipes elaborados por las abuelas para la alimentación de todos, un lugar de tradición y el contacto con la naturaleza y la aventura. Liborina, un destino para sumergirse.